Siéntete satisfecho ante cualquier situación vital


La mente del mono loco es una metáfora que hace alusión a un primate que va saltando de rama en rama de forma frenética buscando el tronco perfecto para estar totalmente cómodo pero no lo encuentra y nunca se detiene en su búsqueda. Esta misma situación puede estar pasándote si buscas compulsivamente fuentes de gratificación externas -proyectos, un trabajo mejor, aficiones nuevas o una pareja- para sentirte realizado.

Esta metáfora la utiliza el psicólogo Rafael Santandreu para explicar cómo funciona la mente de una persona que se comporta de forma neurótica. Como verás ahora mismo con un ejemplo es fácil que tu mente caiga en este tipo de trampa

Al empezar un curso nuevo es muy común que te asalten un montón de proyectos, metas o asignaturas pendientes que quieres conseguir en tu vida. Y pensar en ello te puede generar cierta ansiedad o nerviosismo porque te obsesionas en querer abarcarlo todo. Esto sucede porque dejas a tu mente campar a sus anchas concediéndole demasiada importancia a logros que realmente no la tienen y es en ese punto en el que puedes desarrollar la mente del mono loco.

El síntoma principal que experimentas es que nada de lo que haces o tienes en tu vida te satisface plenamente, te sientes desorientado y siempre piensas que estarías mejor si consiguieras otro trabajo, si tuvieras una pareja que te llenará más o si emprendieras tu propia empresa. Y es que tu mente se convierte en experta en la creación de necesidades vitales y te vuelves incapaz de ver que no precisas ninguna de ellas para sentirte realizado.

La clave de tu bienestar reside en ti mismo y en controlar tus pensamientos para sentirte satisfecho ante cualquier situación de tu vida, teniendo claro que por más cosas que hagas o consigas no vas a ser más feliz. Piensa que tu bienestar mental depende de tu forma de pensar y de interpretar de forma racional lo que te sucede en el día a día.